Derinkuyu: Un Viaje a la Ciudad más Profunda del Mundo

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Derinkuyu es una impresionante ciudad subterránea situada en la región de Capadocia, en Turquía. Con sus profundidades que alcanzan hasta 60 metros bajo tierra, Derinkuyu es considerada la ciudad subterránea más profunda del mundo.

Esta increíble hazaña de la arquitectura antigua fue excavada en la suave roca volcánica de la región y sirvió como refugio para miles de personas a lo largo de la historia. En este artículo, exploraremos la historia, arquitectura y misterios que rodean a Derinkuyu.

Historia de Derinkuyu

Aunque no se sabe con certeza cuándo se construyó exactamente Derinkuyu, se cree que la ciudad subterránea fue excavada durante el período hitita, alrededor del siglo VIII a.C. Derinkuyu fue posteriormente ampliada y habitada por sucesivas civilizaciones, incluyendo los frigios, persas, romanos, bizantinos y selyúcidas.

Durante el período bizantino, entre los siglos V y X d.C., la región de Capadocia se convirtió en un importante centro del cristianismo primitivo. Derinkuyu y otras ciudades subterráneas cercanas se utilizaron como refugios para proteger a los cristianos de las invasiones y persecuciones.

Arquitectura de Derinkuyu

Derinkuyu es un impresionante ejemplo de ingeniería y arquitectura subterránea. La ciudad consta de 18 niveles, de los cuales se cree que ocho están completamente excavados, y se extiende hasta 60 metros bajo tierra.

Aunque no todos los niveles están abiertos al público, las áreas accesibles revelan una compleja red de túneles, habitaciones, almacenes, establos, cocinas, iglesias y espacios comunales.

Las diferentes áreas de Derinkuyu están conectadas por pasillos y escaleras, que permitían a sus habitantes moverse fácilmente entre los niveles. La ciudad también cuenta con sistemas de ventilación y pozos de agua, asegurando que los residentes tuvieran acceso a aire fresco y agua potable.

Una característica única de Derinkuyu son sus enormes puertas de piedra circulares, llamadas «kayraks», que se utilizaban para bloquear los pasillos en caso de invasión o peligro. Estas puertas, que pesan hasta 500 kg, podían ser rodadas para bloquear los pasillos y sólo podían ser abiertas desde el interior, proporcionando una defensa eficaz contra los invasores.

Vida en Derinkuyu

Se estima que en su apogeo, Derinkuyu pudo albergar a más de 20,000 personas, junto con sus animales y provisiones. La vida en la ciudad subterránea estaba organizada de manera eficiente y autónoma, lo que permitía a sus habitantes sobrevivir durante largos períodos sin salir a la superficie.

Las cocinas y áreas de almacenamiento eran esenciales para la vida cotidiana en Derinkuyu. Los almacenes contenían granos, legumbres, aceite de oliva y vino, mientras que las cocinas estaban equipadas con hornos excavados en la roca y chimeneas para la ventilación. Los establos proporcionaban refugio para animales como caballos, ovejas y cabras.

La vida espiritual también era importante para los habitantes de Derinkuyu. La ciudad cuenta con varias iglesias excavadas en la roca, que incluyen altares, bancos y nichos para iconos religiosos. Estas iglesias eran lugares de oración y reunión para la comunidad cristiana.

Derinkuyu también tenía sistemas de defensa bien pensados. Además de las ya mencionadas puertas de piedra, la ciudad contaba con trampas y pasadizos secretos diseñados para confundir y detener a los invasores. Estas características de seguridad permitieron a los habitantes de Derinkuyu resistir asedios prolongados y protegerse de las amenazas externas.

Derinkuyu en la actualidad

Hoy en día, Derinkuyu es un popular destino turístico que atrae a visitantes de todo el mundo. La ciudad subterránea fue abierta al público en 1969 y desde entonces ha sido objeto de numerosas investigaciones arqueológicas y estudios de conservación.

El recorrido turístico por Derinkuyu permite a los visitantes explorar varios niveles de la ciudad y comprender cómo vivían sus habitantes en esta fascinante estructura subterránea.

Aunque gran parte de Derinkuyu sigue siendo inaccesible debido a la inestabilidad de la roca y a las preocupaciones sobre la conservación, los visitantes pueden experimentar de primera mano la increíble ingeniería y el ingenio que permitió a miles de personas vivir bajo tierra durante siglos.


Derinkuyu es un testimonio del ingenio humano y la capacidad de adaptación en circunstancias adversas. La ciudad subterránea más profunda del mundo ofrece una visión única de la vida en la antigua Capadocia y destaca la importancia de estas ciudades subterráneas como refugios y centros de resistencia durante períodos de conflicto y persecución. La visita a Derinkuyu es una experiencia inolvidable que permite a los visitantes sumergirse en la rica historia y arquitectura de una de las maravillas subterráneas más impresionantes del mundo.

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